Triunfa José Mauricio en Huamantla

TP/Emiliano Melgar/ Foto  A.Sainos/tauropasion.com

domingo 18 de agosto 2019; Huamantla, Tlax.-Grato sabor de boca deja la “corrida de huamantlada” y cierre de feria, que registró una ocupación de mas de la mitad de los tendidos de la Plaza de Toros Fernando de los Reyes “El Callao” de Huamantla en Tlaxcala, en la que se presentaron los matadores José Mauricio, Calita y Diego Silveti con 6 excelentes toros de “Mimiahuapan”.

El festejo tomó nivel en su inicio cuando José Mauricio entendió al primero de su lote y conectó con el público que quería espectáculo y fiesta; caso similar para su segundo astado que permitió al diestro lucirse, para con decisión -más- del respetable obligar al Juez a mostrar el pañuelo verde (señal de indulto), que le mereció dar vuelta al ruedo con rabo simbólico.
Por su parte, Ernesto Javier “calita” no queriendo quedarse atrás se metió a fondo con su primer animal el que le propinó un “trompicón” sin consecuencias, fallando en el estoque
con una “pinchadura” que fue acompañado del silencio; para el segundo no hubo oportunidad de resaltar y recibe ovación de la gente que pedía más.
En su cita con la historia, apoyado y con los consejos de su tío Alejandro, Diego Silveti salió al ruedo para hilvanar pases toreros de sobriedad, con cadencia que contrastaba a lo realizado por sus antecesóres que le redituó una oreja en el primero y ovación en el segundo tras fallar con el hierro.
FICHA:
6 toros de “Mimiahuapan” con magnífica presencia y trasmisión, destacan en comportamiento el segundo que recibió arrastre lento y el cuarto que fue indultado; el primero y tercero aplausos en el arrastre.
Para José Mauricio dos Orejas del primero y rabo simbólico tras indulto del segundo; Ernesto Javier “Calita” silencio tras pinchar y ovación, en el primero y segundo respectivamente; Diego Silveti oreja de gran valor del primero y ovación tras pinchar en el cierra plaza.
Al final José Mauricio salió a hombros como triunfador indiscutible de la tarde y de la feria, quien se dejó tocar y fotografiar por la gente que se volcó en simpatía, mismas muestras de cariño para sus alternantes, que caminaron por el callejón de acceso a la taurina rodeados de las familias que se dieron cita para atestiguar lo hecho por los alternantes.

Un gran temor…(opinión)

TP/José Antonio Luna Alarcón

 

Viernes 16 de agosto del año 2019.-Por estar lastimado de un músculo en la pantorrilla, Eduardo Gallo renunció a continuar con los intentos de estoquear al bicho. Al segundo aviso dejó los trastos, y abandonó el ruedo dejando al toro con varios pinchazos. Ahí, vino una complicación, la autoridad en vez de tolerar que el par de minutos transcurriera y que sonara el tercer aviso con el fin de que el toro se fuera vivo, le dio indicaciones al segundo espada, Octavio García El Payo, para que lo matara y pinchazo tras pinchazo con el estoque largo y con el de descabellar, el toro quedó como coladera, pero sin caer. Tres avisos más dos previos, la plaza hirviendo y al Payo, tan furibundo que se le asaban chiles en la espalda. Héctor Gabriel fue el tercer alternante y la corrida mansurrona, débil y sosa, de Begoña fue lidiada en Teziutlán.

Una persona que estaba junto a mí en el burladero de contrabarrera, me soltó: “Cuando veo esto, pienso que los antitaurinos tienen razón”. Lo entiendo, la ineptitud, el abuso en las fallas con el estoque y el que no haya un límite en la cantidad de intentos para tirarse a matar o descabellar, hacen que así, el toreo sea algo grotesco y tremendamente cruel. Sin embargo, no es que los antis tengan razón, porque ellos piensan que los aficionados nos regodeamos en el sadismo, que disfrutamos con la sangre que mana de los morrillos. Sin embargo, lo que en la plaza estaba pasando, era exactamente lo contrario: la indignación general tomó partido a favor del toro y con pañuelos blancos, gritos y silbidos, se pedía que se suspendieran las agresiones al cornúpeta.

Cómo la vida no está llena de casualidades, sino de causalidades, el miércoles, a mi cubículo universitario entró un profesor con la intención de comentar cualquier cosa. Tomó una fotografía, un natural precioso que aprecio más, porque el torero retratado es mi hijo, y espetó sin que nadie le preguntara: “No estoy de acuerdo en nada con el sadismo del toreo. Ese sí es un tema que no soporto, torturar a los animales se me hace nefasto”. Con poco ánimo por experiencias pasadas, le contesté que le faltaba información y que no sabía de lo que hablaba. “Ni me interesa”, dijo tajante. No pretendía yo, desde luego, hablarle del toro como animal mítico y sacrificial, ni de los múltiples simbolismos que tiene una corrida, ni contarle la historia del toreo de Curro Guillén a Pablo Aguado, ni menos de la actitud heroica que asume un muchacho herido en la arena, con el traje de luces rasgado, sin dar muestras de lo que le está doliendo y permanecer en el ruedo hasta cumplir totalmente con su deber. No. Simplemente, quería decirle que primero investigara sobre el tema y que luego, hablara, porque en el asunto de la afición a los toros no caben palabras como sadismo ni tortura. Según el diccionario de la Real Academia Española, la palabra sadismo significa: “Crueldad refinada con placer de quien la ejecuta” y tortura la define como: “Grave dolor físico o psicológico infligido a alguien con métodos y utensilios diversos, con el fin de obtener de él una confesión, o como medio de castigo”. Ninguna de las dos son acertadas en el mundo de los buenos aficionados que velan porque al toro se le trate con lealtad y sólo se le haga el daño estrictamente necesario.

Me asombra y encabrita la intransigencia y el fanatismo, los antis están dispuestos a morir y matar por ellas. En las puertas de las plazas, los he visto y oído insultar, escupir y atacar a los aficionados que pasan cuando ellos hacen valla. Creo que lo que tienen es un gran temor, el de saber que hablando se entiende la gente y ellos, precisamente, no quieren entender.

 

La Lotería de la vida…(opinión)

TP/José Antonio Luna Alarcón

Viernes 9 de agosto del  2019.-Es caprichoso el azar, esa misteriosa lotería de la vida que elige a uno para darle el premio mayor, incluidos París, champaña y una guapa de las que quitan el hipo, y a otro, le atiza un cáncer que te mueres de la risa. El azar escoge y desprecia, pero no hay forma de zafarse cuando del bombo sale tu bolita, para bien o para mal, y la cosa es que siempre sale. No sólo es caprichoso, además, le gusta gastar bromas, a veces, muy pesadas.

La frase con la que empecé el texto, no es mía. Es el título de una canción compuesta por Joan Manuel Serrat y que su mejor versión es la que canta junto con Ajinoam Nini, conocida como Noa: “No te busqué / ni me viniste a buscar / tú estabas donde / no tenías que estar / y yo pasé / pasé sin querer pasar…” Sí, es muy caprichoso el azar. Por eso, tal vez, la palabra sacramental del toreo sea la expresión de ¡suerte! que se dice a los toreros. A su vez, los lances, pases, puyazos, pares de banderillas y estocadas, se llaman suertes, porque sumada a la técnica y a la ejecución correcta de cada acción torera, se requiere de buena fortuna para concluirla de la mejor manera y con el pellejo sin rasgaduras. Para que sea el acaso el que decida, las mañanas de corrida, también se sortean los toros.

Miren ustedes lo que es el azar: El veintidós de mayo Roca Rey toreaba una corrida de Parladé. Su primero fue devuelto y a cambio, salió un toro del señor conde de Mayalde. Al inicio de la lidia, el diestro fue prendido en el embroque de la primera gaonera, recibiendo tremendo arropón en dos partes, primero, le quitó violentamente los pies del suelo, y después, ya derribado, le volvió a arreglar su asunto, fueron dos golpazos contra la arena, que los sismógrafos registraron trepidaciones de muchos grados. Aparentemente, la cogida era sin consecuencias, una cornada de seis centímetros de profundidad en el muslo y muchos golpes. Algo barato tras las tremendas volteretas, cosa que olvidamos en cuanto cortó las dos orejas y se fue a hombros, tarde de magnífica suerte.

Pero, a los pocos días, el azar empezó a manifestarse con un dolor de espalda. Corrida tras corrida, sin saber el diestro que tenía la columna vertebral como marimba, Roca Rey se sentía peor, hasta que llegó a torear infiltrado y luego, perdió toda la fuerza en el brazo derecho. Resultado: interrupción de la temporada,  “¡bip, bip!”, encendido de las alarmas de emergencia de las empresas que lo tenían firmado en diecisiete  contratos para el mes de agosto. Es posible que se quede sin torear también en septiembre. Viaje a una clínica de Nueva York, revisión médica muy concienzuda, diagnóstico: que el azar caprichoso le hizo un chistorete, un par de vértebras le están oprimiendo un nervio y adiós a lo mejor del verano.

Mientras tanto, Cayetano Rivera Ordoñez no se imaginaba que él iba a ser el sustituto de Roca Rey. No se pregunten por qué, sólo recordemos que el azar es caprichoso, ni el hijo de Paquirri sabe el motivo por que le tocó el premio mayor de la lotería: dinero, carteles de lujo, encierros noblotes y actuaciones en las ferias más importantes de España. Atragantón de toreo.

Es verdad, que la buena fortuna le ha sonreído toda su vida. Cayetano, por su condición familiar privilegiada, no tuvo que pasar las de Caín como la mayoría de los novilleros, la vida le ha sonreído en pasarelas y ruedos, verdes son tus ojos. Esa buena suerte, no quiere decir que no sea buen torero, lo es, farruco, artista y muy valiente, su actuación en Pamplona fue de primera. Sin embargo, encajado hasta la montera en el sino de la buena ventura, el primer sorprendido habrá sido él mismo.

Por su parte, mientras la vida besa en la boca a Cayetano, se quedan con las ganas de un guiño en las espadas, entre otros, Paco Ureña, Curro Díaz y Diego Urdiales, toreros que han estado en la guerra dejando mucha sangre en la arena y la coqueta ingrata no les toca los labios. ¿Por qué no Pablo Aguado?, se pregunta el que firma éste texto. No le doy vueltas, la respuesta es muy simple: porque es caprichoso el azar.

 

 

José Luis Angelino sale a hombros en Tetla, Tlaxcala

TP/Ángel Sainos
Lunes 29 Julio de 2019,Tetla, Tlaxcala.- Plaza de Toros Raúl González
Más de media entrada en tarde primero soleada y desde el 2.º con fuerte lluvia que amaino en el 4.º.

1 becerra de Polo Carvajal buena
4 Toros de Tenexac de juego desigual, los dos primeros complicados y los dos últimos extraordinarios siendo premiados con vuelta al ruedo

Para:

El niño Marco Pelaez que abrió plaza lidiando a la portuguesa la vaca y
escuchando fuerte ovación en el tercio.

Los matadores

José Luis Angelino
Silencio / Dos orejas

Sergio Flores
Silencio / Oreja tras 1 pinchazo y un golpe de descabello.

Al final José Luis salió a hombros.

Las figuras, presentes en Cali 2019

  • La Feria de Cali 2019 confirma a cuatro de los toreros que forman parte de su elenco.
TP/ Ángel Sainos
Jueves 8 de agosto 2019.- La empresa será Promotoreando Colombia, que en sociedad conforman  el Ingeniero Alejandro Martínez Vertiz Riquelme, y Juan Bernardo Caicedo.
Enrique Ponce, Sebastián Castella, José María Manzanares y Andrés Roca Rey, han dicho sí a Cali, y en el mes de diciembre harán el paseíllo, en lo que será la segunda feria organizada por esta empresa que une las visiones de México y Colombia.

La plaza de toros de Cañaveralejo, celebrará además una Corrida Goyesca bajo el sello del gran artista francés Loren Pallatier, quien plasmará el arte a través de su obra que engalanará los rincones más importantes de este escenario.

Otro de los anuncios destacados hecho por los empresarios es el Concurso de Ganaderías, donde se buscará trapío y seriedad de las ganaderías en la zona del Valle del Cauca, dando así el prestigio al toro de lidia colombiano.